Cuando sentimos que hay un problema en nuestra relación con la comida, este puede estar apareciendo de diferentes formas. Algunas de ellas podrían ser:
Cuando sentimos que hay un problema en nuestra relación con la comida, este puede estar apareciendo de diferentes formas. Algunas de ellas pueden ser:
- Como para calmar la ansiedad, las preocupaciones, la inquietud, la tristeza, la sensación de vacío…
- Como sin tener hambre, o no me siento saciado/a después de la ingesta.
- Me preocupo de forma excesiva por la comida: por la cantidad, las calorías, los nutrientes…
- Mis preocupaciones y pensamientos en torno a la comida ocupan una gran cantidad de tiempo en mi día a día.
- No disfruto de la comida como antes.
- Me siento agotado/a por la cantidad de energía que ocupan estas preocupaciones.
- Siento una gran insatisfacción con mi figura: me miro en el espejo todo el tiempo o, al contrario, evito mirarme a toda costa.
- Me preocupa mucho engordar.
- Como de una manera caótica y desordenada.
- Evito las reuniones familiares o las quedadas con los amigos si existe la posibilidad de comer.
- Me doy atracones de comida que de normal está en mi lista de «comidas prohibidas».
- Hago muchísimo ejercicio para no engordar o porque me preocupa no estar sano/a.
Cuando la motivación por estar en forma, sana, delgada, etc., comienza a ser excesiva, podría ocultar problemas emocionales que tratamos de gestionar a través de la comida. Es importante abordar estas cuestiones, entenderlas y aprender a tener una relación más saludable con la comida, no sólo para evitar que estas preocupaciones se agraven y se cronifiquen, sino también para obtener una mayor calidad de vida y bienestar personal.
En CL Psicología, te ayudamos a procurarte una relación sana con la comida, practicando la alimentación consciente (mindful eating), manteniendo una alimentación sana, ordenada y equilibrada, y aprendiendo a gestionar tus emociones, para que no depender de la comida para calmar la ansiedad, tristeza o preocupación. En este proceso, es fundamental trabajar en la reconexión con nuestro cuerpo, con nuestras sensaciones corporales y con nuestras emociones. Porque comer es una forma de comunicarnos y de cuidarnos.